El hombre había advertido a las autoridades escolares que recurriría a la violencia porque dijo que los menores serían intimidados.
Un padre discutió con 30 estudiantes que intimidaban a sus hijos. El hombre había dicho a las autoridades escolares que recurriría a la violencia por la intimidación de la menor. El incidente tuvo lugar en una escuela secundaria en Texas, Estados Unidos.
El incidente ocurrió cuando Willie Smith, de 40 años, fue a recoger a sus hijos a la escuela de Tucson. Según el Daily Mail, el hombre acudió a la institución porque los administradores le pidieron que los recogiera debido a un disturbio con otros estudiantes.
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Cuando Smith los sacó del edificio, el personal de la escuela le aconsejó que saliera por la parte de atrás para evitar más enfrentamientos con otros estudiantes.
Sin embargo, el hombre se negó y llevó a su hijo al otro lado del patio. A su vez, le dijo al director que se volvería violento porque la menor era acosada por otros estudiantes.
Todos los estudiantes estaban almorzando cuando se fueron. Según los informes, tanto el padre como el niño fueron objeto de burlas por parte de un grupo de niños, y fue entonces cuando comenzó el conflicto.
el momento de la pelea
Se cree que al menos 30 estudiantes participaron en la pelea. En las imágenes se puede ver cómo se desarrollaba la violencia ante los ojos de las autoridades del plantel, quienes debieron intervenir de inmediato.
La policía llegó al lugar y arrestó al hombre. En ese momento, admitió haber peleado con un estudiante al que le daría un puñetazo y luego lo inmovilizaría en el suelo. Según su relato, más tarde se sumaron otros estudiantes.
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La hermana del imputado, Rosalinda Martínez, ha asegurado que su hermano ha quedado en libertad mientras continúa la investigación para esclarecer lo sucedido.
Rosalinda explicó en una entrevista con el Daily Mail: «El juez vio todos los videos y entendió la situación. Le dijo que podrían haber hecho las cosas de otra manera y evitar todo esto».
«Estoy segura de que los niños necesitan algún tipo de asesoramiento. Eso duele. Uno de mis sobrinos tiene una conmoción cerebral», dijo la mujer.
La escuela secundaria estuvo cerrada durante horas después del incidente. La agencia también emitió un comunicado sobre lo sucedido.
«La escuela sigue los protocolos de seguridad. La policía de Tucson y el personal de seguridad escolar respondieron de inmediato y permanecerán en el campus para asegurarse de que no haya más problemas», dice el comunicado.
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Muchos padres dijeron que las autoridades usaron fuerza extrema para controlar el incidente. Además, informaron que durante la pelea se utilizó gas pimienta. Sin embargo, la policía negó las acusaciones.